LAS AVENTURAS DE MAQROLL EL GAVIERO

LAS AVENTURAS DE MAQROLL EL GAVIERO

PERFIL.

"(... ) y olvido así quien soy, de dónde vengo
hasta cuando una noche
comienza el golpeteo de la lluvia
y corre el agua por las calles en silencio
y un olor húmedo y cierto
me regresa a las grandes noches del Tolima
en donde un vasto desorden de aguas
gira hasta el alba su vocerío vegetal
su destronado poder, entre las ramas del sombrío
chorrea aún en la mañana
acallando el borboteo espeso de la miel
en los pulidos calderos de cobre
Es entonces cuando peso mi exilio
y mido la irrescatable soledad de lo perdido”

Álvaro Mutis

 

Por el mar Caribe pasa navegando Maqroll el Gaviero, el marino que vigila el horizonte de las caudalosas aguas de la costa colombina, vive sorprendentes aventuras en mar adentro abandonando el control del tiempo, el espacio, las normas y los sentimientos, es un personaje rebelde, valiente, soñador y ficticio de las embarcaciones petroleras que acompaña siempre a uno de los escritores más reconocidos en Colombia; es el amigo entrañable de Álvaro Mutis Jaramillo, el escritor y poeta colombiano le dio vida a un personaje que lo llevo navegando hacia el premio Cervantes.

 

Álvaro Mutis, nacido en 1923 en la ciudad de Bogotá (Colombia) pero vivió su infancia en Bruselas (Bélgica), eso no fue motivo para que el colombiano olvidara sus raíces y regresara nuevamente a su país, cuyos viajes constantes entre el Viejo Continente y América le dieron la inspiración para crear personajes como Maqroll el Gaviero. Los recuerdos, las costumbres, la naturaleza tropical colombiana y los olores, iluminaron la mente del escritor iniciando así su vida literaria.

 

"FABULOSAMENTE SIMPÁTICO"

Los amigos del escritor lo catalogan como alguien que siempre está sonriendo, una persona a la que le agrada todo lo que hace y lo que hay a su alrededor, creando amistades y valorando el trato con la gente; ante eso Gabriel García Márquez lo catalogó "fabulosamente simpático" según se establece en una entrevista con Marta Rivera de la Cruz, dándole una identidad al escritor y posicionándolo como un hombre amable, espontaneo y sonriente.

 

La humildad de Álvaro Mutis no solo está reflejada en las historias que relata y escribe, también está en sus palabras de agradecimientos constantes y en el carisma que trasmite al interactuar con estudiantes o cualquiera que esté cerca de él, como forma de disfrutar cada momento de su vida. El espíritu social y humano le brinda espacios para crear historias, novelas y poemas que lo convierten en uno de los escritores más reconocidos y premiados a nivel internacional, dándole la oportunidad de fortalecer la experiencia como publicista y relacionista público, fomentando amistad con personajes reconocidos como, Gabriel García Márquez, Fernando Botero, Hernando Téllez y Eduardo Zalamea.

 
TRAYECTORIA LITERARIA
 

El hombre de 89 años de edad y quien por sus canas refleja toda una vida literaria, marca la diferencia por su estilo en el que la narración se convierte en poesía y el poema en historia, dándole importancia a la literatura, a la inmortalidad de la poesía y al valor de las palabras, defendiendo ello como la única prueba de la existencia del ser humano. "La poesía no puede morirse nunca; se acabará el mundo, morirá el último hombre y seguirá existiendo" dijo Mutis en una entrevista con la periodista de la Universidad Complutense. Por eso, en 1948 fue considerado el principal poeta joven colombiano.

 

Aparte de la experiencia en la literatura, el escritor se ha desempeñado en diferentes medios sociales y laborales, se familiarizó en el mundo de la radio al trabajar en la emisora Nuevo Mundo de la Cadena Radial Colombiana, Caracol, con el programa "Actualidad literaria", la Compañía Colombiana de Seguros lo nombró jefe de redacción de su revista institucional Vida, fue jefe de relaciones públicas de la Esso, jefe de relaciones públicas de Lansa, gerente de ventas en América Latina de la Twentieth Century Fox y luego de la Columbia Pictures hasta jubilarse en el año 1988. Carreras que le ayudaron a publicar sus textos.

 

El escritor, hijo de Santiago Mutis Dávila y de Carolina Jaramillo, recuerda desde niño la finca que heredo su madre, “Coello”, ubicada en el departamento del Tolima (Colombia), fue el lugar donde el poeta paso la infancia vacacional, viajando desde Europa hacia su tierra natal, sitio que le brindó la oportunidad de abrir su imaginario para crear los textos literarios. Sin culminar el bachillerato el poeta se instaló en Colombia prefiriendo la educación de los libros al cotidiano pensum educativo colombiano, valorando las historias, los cuentos y relatos que dejan los viajeros en la literatura. A los dieciocho años decide tomar las riendas del matrimonio con   Mireya Durán, quién luego le dio tres hijos.

 
UNA EXPERIENCIA DOLOROSA
 

Después de su experiencia laboral, Mutis se ve implicado en una demanda por un error en la dictadura de Esso, México fue el país que lo recibió con las puertas abiertas para luego cerrarlas condenándolo a dieciocho meses en la cárcel. Las acusaciones en su contra fueron la causa para que el escritor fortaleciera su sentido humano y social privado de la libertad, dándole el conocimiento que necesitaba para enriquecer su personalidad "Estos meses de encierro los considero como una terrible pero fecunda experiencia humana, que me ha acercado a mi corazón y a mis asuntos. Yo antes era un "niño bien", y de esta vida tan fácil viene naturalmente una insensibilización. Éste ha sido un trance importante, doloroso, pero se han abierto una cantidad de puertas a la sensibilidad y creo que por primera vez sé lo que es el contacto humano verdadero" expresó el escritor.

 

Tras la experiencia de la cárcel, no fue en vano su papel como relacionista público, el carisma, el humanismo, la simpatía y su experiencia social lo convirtieron en uno de los escritores más reconocidos de literatura a nivel mundial, aprovechando cada momento con su libreta, hasta en las alturas el papel y el lápiz no se libraban de las historias redactadas por el colombiano, pues muchos de sus poemas los escribió sentado en la sala de espera de un aeropuerto, en el avión y hasta en los cuartos de los hoteles. Mutis adquirió la capacidad de conocer el mundo gracias a su trabajo y supo como permanecer en el cariño de quienes lo rodean.

 
LA HUELLA QUE DEJA MUTIS
 

Álvaro Mutis, es un hombre que valora la amistad, la relación con los demás, el arte, la poesía y la literatura, un escritor que marca la diferencia en la narración de sus historias, con un estilo único que atrae la imaginación de los lectores, si no, que lo diga su entrañable amigo Maqroll el Gaviero, el personaje ficticio de la saga aventurera creada por el poeta. De esta manera el escritor colombiano adquiere reconocimiento en diferentes países del mundo. En México, país de residencia,  celebraron sus 89 años de edad el pasado mes de agosto, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, entidad mexicana, destacó la vida del escritor colombiano, valoraron su trayectoria diciendo: "sin duda ha enaltecido la literatura colombiana y de habla hispana".

 

Además, los mexicanos no son los únicos que han seguido la vida de Mutis, él se ha visto honrado de recibir valiosos reconocimientos por su trayectoria literaria, entre ellos: El Premio Nacional del Nadaísmo para Poesía en 1965, se le concedió en Colombia el Premio Nacional de Poesía en 1983, recibió en México el Premio de Crítica Los Abriles por su libro Los Emisarios en  1985, por la novela La Nieve del Almirante, obtuvo el Premio Médicis al mejor libro traducido al francés en 1989, la Universidad del Valle le concedió el grado de Doctor Honoris Causa en Letras y recibió el Premio Xavier Villa Urrutia en 1988, el gobierno italiano le concedió el Premio Nonino al mejor libro extranjero publicado en Italia en 1990, la Universidad de Antioquia le concedió el grado de Doctor Honoris Causa en literatura y el gobierno colombiano le otorgó la Cruz de Boyacá en 1993, fue galardonado con el Premio Cavour en Italia en 1997, en España obtuvo el Príncipe de Asturias en 1997 y Premio Cervantes en 2001, el gobierno francés le otorgó la Orden de las Artes y las Letras en el grado de caballero.

 

Todo lo anterior deja ver que aquel navegante no fue creado en vano, fue la inspiración del escritor colombiano para dejar su huella en el mundo de la literatura, sin querer, hoy es reconocido como uno de los escritores colombianos que dejan plasmado en sus textos el valor de lo humano, de las palabras y de hacer parte de una sociedad que puede transcender en la literatura. Ante esto, el poeta dice "Es preciso tener las más bellas palabras listas en la boca para que nos acompañen en el viaje por el mundo de las tinieblas. Es menester lanzarnos al descubrimiento de nuevas ciudades. Generosas razas nos esperan. Buscar e inventar de nuevo. Aún queda tiempo. Bien poco, es cierto. Pero es menester aprovecharlo"

 

Por: Sharin Catalina Hoyos Sucerquia