EL MISTERIOSO BESO ROBADO
La plaza de Times Square en Manhattan se inundó de la euforia y alegría de los marineros, la noticia del triunfo sobre las tropas japonesas fue fiesta en las calles de Nueva York, rostros sonrientes, sorprendidos, alegres y con ánimo de celebración quedaron grabados en una de las imágenes más famosas en la historia. Alfred Eisenstaedt y Victor Jorgensen nunca imaginaron que su pasión fotográfica, reflejada en el famoso beso de 1945, fuera de inicio de una polémica sobre agresión.
Dos caras de la moneda, dos ángulos, dos protagonistas y dos fotógrafos hacen parte de esta historia, en la que se desencadena un misterio por un beso robado en un momento de victoria. El 14 de agosto de 1945 al culminar la segunda guerra mundial, Jorge Mendonça decidió celebrar besando a la primera enfermera que se apareciera en su camino, en agradecimiento por la labor y sacrificio de estas mujeres en la guerra. Años después su acto se vio envuelto en críticas y protestas que argumentan defender a la mujer de las agresiones.
‘El marinero que besa o la ceguera selectiva de la cultura de la violación’ es el título expuesto en un Blog que defiende los derechos de la mujer, argumentando que la sociedad está ciega ante los abusos contra el género femenino, pues en la fotografía se identifican transeúntes que sonríen al ver el romántico beso y evaden la posición de la enfermera en la fotografía de Victor Jorgensen, su mano esta empuñada sobre el rostro de Mendonça, aparentemente alejándolo de ella dando a entender de fue víctima de un abuso por parte del marinero.
Sin embargo, las versiones establecidas por tres mujeres, quienes se identificaron como la enfermera protagonista, dejan marcada una incógnita sobre si fue o no una agresión; Edith Shain, Greta Friedman y Barbara Sokol fueron las enfermeras que se presentaron argumentando ser besadas por el marinero, versiones que aún no son claras y ha sido difícil comprobar, sus rostros no son claros en las fotografías y los comentarios son semejantes a lo sucedido aquel día de victoria.
Por ahora, la fotografía seguirá identificada como un romántico beso y como la foto de amor más famosa de la historia. ¿Romance o agresión? Aún no es claro y lo dejamos en manos de los verdaderos protagonistas, a nuestros ojos quedará una imagen en la que se celebra con un beso una gran victoria.
Por: Sharin Catalina Hoyos S.